Pensar que San Petersburgo fue Leningrado - Stalingrado y no sé cuanto más...
Así como cada una de las ciudades relatadas en este intercambio entusiasmaban apenas uno aterrizaba en ellas, se mostraban amigables y bellas no nos ha ocurrido lo mismo con SP, el viaje en bus fué muy còmodo y el paso por migraciones tanto de la salida de Estonia como el ingreso en Rusia a pesar de la demora por la cantidad de gente fue ágil y bien.
Pero SP no tiene entrenamiento turístico, nadie, salvo excepciones, en la calle habla otro idioma que no sea el propio, no hay oficina de turismo ni en la estación de tren terminál ni en la de ómnibus, bajamos en la calle frente a la terminál de tren y de ómnibus.
La persona del transfer no nos vino a buscar, no había donde cambiar dinero y tampoco quien nos asesore.
En la búsqueda encontramos un cana que hablaba bastante inglés que no pudo orientarnos más que indicarnos el Metro pero no teníamos cambio para el mismo.
Buscamos un taxy, no tienen reloj, hay que arreglar previo, un chofer nos pidió 1000 rublos que son 25 euros, arreglamos con otro por 500 rublos.
En el camino hacia el hotel pudimos ver una muy gran y grande ciudad, diría que la explicación sería una ciudad GORDA, todos edificios si no altos si enoormes, con frentes iguales y grises. En definitiva SP no es Oslo pero hay mucho para disfrutar, el hotel muy bien y el personal se maneja con un perfecto inglés, mejor que el mío que es bastante pobre como para no morirse de hambre.
Inclusive quien habla un poco de español...en definitiva a eso de las 10 de la mañana estabamos instalados y dormí luego de una confortable ducha hasta las tres de la tarde.
Acá hay 7 horas más que en nuestro país la deducción es que me han robado 7 horas de vida que me serán devueltas al finál del tour.
La ventana de la habitación da a la calle sobre una plaza, como en todos lados los pibes chiquitos jugando, abuelos y padres acompañan.
Hoy es sábado espero que disfruten, dejen algo para nuestra vuelta.
yeyedos
Así como cada una de las ciudades relatadas en este intercambio entusiasmaban apenas uno aterrizaba en ellas, se mostraban amigables y bellas no nos ha ocurrido lo mismo con SP, el viaje en bus fué muy còmodo y el paso por migraciones tanto de la salida de Estonia como el ingreso en Rusia a pesar de la demora por la cantidad de gente fue ágil y bien.
Pero SP no tiene entrenamiento turístico, nadie, salvo excepciones, en la calle habla otro idioma que no sea el propio, no hay oficina de turismo ni en la estación de tren terminál ni en la de ómnibus, bajamos en la calle frente a la terminál de tren y de ómnibus.
La persona del transfer no nos vino a buscar, no había donde cambiar dinero y tampoco quien nos asesore.
En la búsqueda encontramos un cana que hablaba bastante inglés que no pudo orientarnos más que indicarnos el Metro pero no teníamos cambio para el mismo.
Buscamos un taxy, no tienen reloj, hay que arreglar previo, un chofer nos pidió 1000 rublos que son 25 euros, arreglamos con otro por 500 rublos.
En el camino hacia el hotel pudimos ver una muy gran y grande ciudad, diría que la explicación sería una ciudad GORDA, todos edificios si no altos si enoormes, con frentes iguales y grises. En definitiva SP no es Oslo pero hay mucho para disfrutar, el hotel muy bien y el personal se maneja con un perfecto inglés, mejor que el mío que es bastante pobre como para no morirse de hambre.
Inclusive quien habla un poco de español...en definitiva a eso de las 10 de la mañana estabamos instalados y dormí luego de una confortable ducha hasta las tres de la tarde.
Acá hay 7 horas más que en nuestro país la deducción es que me han robado 7 horas de vida que me serán devueltas al finál del tour.
La ventana de la habitación da a la calle sobre una plaza, como en todos lados los pibes chiquitos jugando, abuelos y padres acompañan.
Hoy es sábado espero que disfruten, dejen algo para nuestra vuelta.

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